Modos de la transferencia: Motor y Obstáculo

      La transferencia es planteada y pensada de distintos modos a lo largo de las obras de Freud y Lacan. Intentaré articularlos aquí, tomando como premisa los puntos de contacto y de distancia entre ambos autores.

     Comenzaré ubicando que la transferencia inevitablemente implica una direccionalidad al Otro: el paciente no solo le dirige preguntas al analista (quien tiene un “saber supuesto” por el paciente), o pide “recomendaciones”, sino que también despliega su neurosis frente a él, asocia libremente, concurre a sus sesiones, “se pone a trabajar” y produce enlaces para encontrar la respuesta a la pregunta que le plantea su síntoma. Esta vertiente de la transferencia es la que conocemos como “motor” ya que conecta al síntoma con la asociación libre, y de esa manera se puede tener acceso al inconsciente.
     Ahora bien, sabemos por Freud[1] que paralelamente, al acercarnos al núcleo patógeno, la transferencia se vuelve resistencia y en consecuencia produce un cierre del inconsciente. En otras palabras, en el mismo momento en que están a punto de ser develados algunos contenidos reprimidos especialmente importantes, y en que existe una mayor proximidad al conflicto inconsciente, la transferencia aparece bajo la forma de resistencia, que supone el silencio, y la detención de ocurrencias y asociaciones. En palabras de Lacan, “el momento en que el sujeto se interrumpe es, comúnmente, el momento más significativo de su aproximación a la verdad. Captamos aquí la resistencia en estado puro, la que culmina en el sentimiento, frecuentemente teñido de angustia, de la presencia del analista”[2].

Las 3 preguntas mas frecuentes al consultar...


Qué es el Psicoanálisis?
El Psicoanálisis es ante todo una ética, y una técnica orientada a una praxis de orden clínico. Una de sus características más destacadas es que trabaja fundamentalmente mediante la técnica de asociación libre.
Lo importante para el psicoanálisis, es el uno por uno, el aquí y ahora; así como todo lo que el sujeto dice sobre sus vínculos y su historia, puesto que con su discurso se irá formalizando el deseo inconsciente. Una de las funciones del analista es que el paciente advierta la relación que tiene con sus síntomas y la función que cumplen éstos.

Cuál es la duración?
La duración del tratamiento dependerá de la problemática que se presente a consulta. Para el psicoanálisis, cada persona es singular, y en consecuencia su padecer también lo es. Por tanto, si los motivos de consulta son diversos, especiales y únicos de cada sujeto, la manera de abordarlos y trabajarlos también lo será.

Cuál es el costo de cada sesión?
Los honorarios son personalizados y cada quien acordará los mismos en la primera entrevista.  En cada caso el dinero cumplirá una función subjetiva particular. 

Día Mundial de la Salud Mental

10 de octubre de 2012

Con ocasión del Día Mundial de la Salud Mental se sensibiliza al público acerca de los problemas de salud mental y se fomenta el debate franco sobre los trastornos mentales y las inversiones en servicios de prevención, promoción y tratamiento. El tema de este año es «La depresión, una crisis mundial».

La depresión afecta a más de 350 millones de personas de todas las edades y en todas las comunidades, y contribuye de modo significativo a la carga mundial de morbilidad. Se dispone de tratamientos eficaces contra la depresión, pero el acceso a ellos es problemático en la mayoría de los países, y en algunos solo lo reciben menos del 10% las personas que lo precisan.

La apuesta clínica del psicoanálisis es el síntoma

El síntoma se presenta de entrada como lo que no anda, como aquello que se pone en cruz, o como la piedra que se nos atraviesa en el camino. 

Aquí hace su entrada el psicoanálisis, que (dejándose orientar por lo real del síntoma que insiste y se repite), posibilita que el analizante mediante su trabajo del decir bajo transferencia, pueda realizar un nuevo anudamiento cambiando así el mal uso que hace de él. 

Solo desde esta perspectiva, la del buen uso del síntoma, es que es funcional, en tanto articula la división subjetiva con la barradura del Otro ó, lo que es lo mismo, al deseo del Otro. 

Lecturas

Las anécdotas lacanianas son todas verdaderas, incluso las que son falsas ya que, en buena doctrina, la verdad se distingue de la exactitud y tiene estructura de ficción. Todo lo que corre por ahí sobre el personaje de Lacan, de lo visto, de lo oído, o de lo forjado, inventado, o simplemente mal-entendido, converge para pintar al hombre de deseo, de pulsión incluso, que era. Era rebelde, insurgente, exigente, hasta en las cosas más pequeñas de la vida. Tal vez sea eso lo más difícil: una insurrección cotidiana, a cada instante, para avanzar en el camino propio, no dejarse distraer, no dejarse detener por los otros, por el otro, por la indiferencia del otro, por su tontería, su torpeza, su mala fe, es decir ¿qué, en definitiva? —sus síntomas. Y, a fin de cuentas, su inconsciente. Y la tontería de su goce.

Sobre la Interpretación

La interpretación en psicoanálisis opera con el material de la lengua, con la materia del significante, la misma materia con la que trabaja el inconsciente. En otras palabras, la interpretación descifra lo que el aparato psíquico ha cifrado. Por ello, su objetivo es conmover la fijación de la satisfacción, es decir, producir un desprendimiento del goce paradójico. Se sirve para ello de lo que Lacan ha llamado el "equívoco", el cual inscribe un sujeto de la enunciación

Conmoción de lo sabido hasta el momento, el equívoco hace vacilar al sujeto, que luego se precipita en decidir sobre el sentido del dicho de la interpretación. El sentido al sesgo designa, moviliza, en la medida en que le deja al sujeto la parte que le corresponde en la elaboración de saber.

Entonces, si la interpretación analítica tiene por objetivo desasir la fijación de goce y atravesar la significación que responde monótona al compás del fantasma, podemos sostener con seguridad que una interpretación eficaz divide, incomoda, despierta. Es decir: suspende la respuesta. Cuando da en el blanco, hace mella en la fantasía, en la sutura que esta constituye, ataca como falso todo lo que venga a ocupar el lugar del objeto causa. Interfiere con la satisfacción fijada, en tanto en el efecto de la interpretación se produce un desprendimiento de dicha satisfacción.